El espacio, la frontera final

Como tenía que ser, hoy, día del estreno mundial de Star Trek, estuve entre el tumulto de fanáticos de la mundialmente conocida saga estelar: "Viaje a las estrellas". Precavido, compré mi entrada tempranito para no hacer cola en la boletería (como pude notar cuando entraba al cine) y a un cuarto de hora para terminar las siete de la noche, estuve empujándome entre vulcanos, klingons (obviamente era yo un klingon), romulanos, humanos y todos los que asistieron al estreno de las ocho mientras nos mirábamos las caras sin decir palabra alguna pero afirmando en ese silencio que éramos devotos de la misma religión  (¿o miembros de la misma federación?), me hice un lugar en la sala y... ta´mare, ¡que peliculón!.

Para los nostálgicos contemporáneos como yo que recuerdan la serie de fines de los noventa en Perú: Star Trek: la nueva generación, y aunque la nueva película ya no trata de ellos, con el capitán Jean-Luc Picard, el “número uno”: William Riker, el teniente comandante Data, la mamacita y ajustadita Diana Troi (flaca de Riker) y el inolvidable teniente Worf, esta película me hizo recordar mis tardes de aquellos años de imperdibles momentos frente a la tele, canal nueve a eso de las tres de la tarde.

En fin, cuenta esta película (que fue para mi una satisfacción), la historia del famoso capitán del Enterprise, James T. Kirk conocido en todos los confines de la galaxia, en el momento justo de tomar el mando de su nave, con cambio de historia  al modificar un hecho en el pasado que desencadena una serie de eventos en un futuro paralelo, interés en todo momento, conociendo a los personajes que conocí ya tíos cuando eran chibolos, y sabrá dios de que universo paralelo nos trajeron al mismísimo señor Spock (esperemos verlo otra vez) como haciendo un homenaje a la serie anticucha de películas de los ochenta.

Quisiera contarles todos los detalles, pero prefiero que vean la película, eso si, en el cine, no compren piratería ya que perjudica al país.

Lo que si les tengo que decir es que luego de los imperdibles capítulos de la serie de mi generación (por que las hay para todas las generaciones) y después de conversar bien con el barbón de arriba, decidí guardar toda la lucidez que me sea posible hasta mis ochentainueve años, para ser testigo de un gran evento, específicamente hasta el 5 de abril de 2063, año en que la raza humana en su afán destructor llegaran a su decadencia hasta casi desaparecer ese será el año en que tendremos el primer contacto con los vulcanos, raza extraterrestre humanoide de intelecto superior... que, ¿no lo sabían?.

Como broche de oro, esta película nos deja con la clásica frase final en la voz del mismísimo señor Spock como una especie de legado: "El espacio, la frontera final. Estos son los viajes de la nave espacial Enterprise. Su continua misión: explorar extraños nuevos mundos, buscar nuevas formas de vida y nuevas civilizaciones, viajando temerariamente a donde nadie ha llegado antes"... taaaa ta ta taaaaaa ta ta ta taaaaaa ta ta ta ta ta ta taaaaaaaaaa...

Larga vida y prosperidad...